¿Cómo eliminar eficazmente los residuos de las juntas más resistentes?

Las juntas y los sellos desempeñan un papel esencial en los componentes y unidades de automoción.

Las juntas y los sellos utilizados en los motores de automóviles son componentes críticos, sin los cuales los motores simplemente no funcionarían. La amplia gama de aplicaciones, temperaturas y, por tanto, materiales, implican que se requiera una gran variedad de materiales y compuestos.

El gran número de combinaciones diferentes de materiales en uso significa que sólo hay un pequeño número de productos eficaces para eliminar las juntas. El sellado eficaz de los componentes evita las fugas de gas y la pérdida de fluidos, sin olvidar la entrada de suciedad o líquidos. Los sellos y las juntas garantizan una lubricación fiable en el motor y la caja de cambios.

Las fugas acortan la vida útil de los componentes y pueden contaminar el medio ambiente y afectar negativamente a la salud de animales y seres humanos.

Un sistema correctamente sellado evita que sustancias peligrosas para el medio ambiente, como el combustible y el aceite del motor o del engranaje, se emitan y liberen de forma incontrolada en el medio ambiente. El sellado eficaz de los componentes también tiene un efecto directo en el rendimiento del motor.

La junta de la culata, por ejemplo, cumple una función vital al mantener el flujo de gases y fluidos en sus respectivos circuitos y evitar que se mezclen. La junta de culata mantiene los gases de combustión en la cámara de combustión, el refrigerante en el sistema de refrigeración y el aceite del motor en el circuito de aceite. En cuanto la junta de culata deja de sellar correctamente, estos fluidos se mezclan o se pierde potencia debido a que los gases de combustión se escapan al sistema de refrigeración, etc.

¿Qué hace que los materiales de las juntas fallen o dejen de funcionar correctamente?

Las juntas y los sellos son como todo lo demás, es decir, envejecen con el tiempo. Por lo general, los componentes de las juntas simplemente fallan debido al proceso de envejecimiento. Los plastificantes de las juntas de goma o la corrosión causada por la contaminación del refrigerante pasan factura y pueden hacer que la junta se rompa y tenga fugas.

Por supuesto, el fallo de otros componentes, como el interruptor del electroventilador o las consecuencias de un mal mantenimiento pueden hacer que el motor se sobrecaliente o provocar otros fallos que provoquen el fallo de la junta. Sin embargo, las causas más comunes son el desgaste y los procesos químicos en los que los plastificantes se pierden con el tiempo y las juntas se vuelven porosas y frágiles, provocando fugas.

Síntomas de juntas y retenes defectuosos:

• una disminución del rendimiento

• mal comportamiento en el arranque en frío

• el refrigerante se contamina con el aceite del motor

• aumento de la temperatura del refrigerante

• ebullición del refrigerante, debido a los gases de escape en el circuito de refrigeración

• pérdida de aceite

• pérdida de refrigerante

Cuando se intenta arreglar las fugas o efectuar una reparación, hay que sustituir los retenes y las juntas. Los sellos y las juntas están diseñados para soportar fluidos agresivos, altas presiones y altas temperaturas, lo cual es muy útil, pero también significa que a menudo son difíciles de eliminar completamente de las superficies de contacto.

La tarea de eliminar los residuos de las juntas puede implicar una gran cantidad de raspado manual, lo que lleva mucho tiempo y es una parte desagradable de cualquier reparación.

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